– La literatura es un desafío a la lógica, no un refugio contra la incertidumbre.
(…)
– ¿Usted cree que yo tomo la literatura como refugio?
– Sí, por supuesto, pero no le vale de nada.
– Ningún refugio vale de nada, pero no se puede vivir al raso.
– Se puede intentar.
– Sería meterse en un laberinto.
– En un laberinto bueno, pero no en un castillo. Hay que elegir entre perderse y defenderse.